USTED PUEDE DEJAR DE FUMAR.

 

 

Por: Elizabeth Sissi González Echemendía.

Todos conocemos que fumar es un mal hábito, abandonarlo no es fácil, pero no es tan difícil como mucha gente piensa. El parar de golpe sigue siendo el método más popular y efectivo.

La relación entre el hábito de fumar y el desarrollo de numerosas enfermedades graves se encuentra cada vez más clara. Esto ha provocado un aumento de las consultas en la comunidad sanitaria y de salud mental.
La  Organización Mundial de la salud  considera una adicción, a la dependencia al tabaco. Este tipo  de dependencia, así como muchas otras, debe ser atendida adecuadamente, ya que la nicotina puede llegar a controlar algunos aspectos importantes del comportamiento de una persona. 
Al igual que otras sustancias euforizantes como el alcohol y la cocaína, el tabaco es capaz de producir efectos que intervienen en el estado de ánimo de los seres humanos y con su privación desencadena un comportamiento de búsqueda de la sustancia.
Las personas fumadoras de cigarrillos tienen una expectativa de vida considerablemente disminuida con respecto al resto de la población. Algunos autores han estimado que se pierden 5,5 minutos de vida por cada cigarrillo que se ha fumado. 
En una persona de 30 a 35 años de edad que fuma dos cajas de cigarrillos diarios, la expectativa de vida disminuye entre 8 a  9 años, en relación a una no fumadora de la misma edad.
Muchos síntomas pueden avisarnos que estamos enfermos producto al vicio, como tos, dolor de pecho y disfonía. También se pueden presentar afecciones   que no tienen que ver con el pulmón como debilidad muscular, vértigos, incoordinación para caminar, pérdida de peso, palidez, cansancio, y aumento del tamaño de las mamas, en estos casos es necesario acudir al médico.

Espero que después que usted lea estos datos reflexione no sólo para si fuma abandone el vicio, sino para que ayude a quienes sabe que lo practica.