VIOLENCIA INTRAFAMILIAR.
Por: Elizabeth Sissi González Echemendía.
La violencia se convierte en uno de los métodos más usados de resolver conflictos entre las personas, y aunque el estado Socialista protege los derechos de las féminas, existe un porciento de éstas que son víctimas del mal en el seno familiar
La Federación de Mujeres Cubanas las agrupa, y las orienta sobre sus derechos, sin embargo de la puerta de la casa hacia adentro ocurren hechos que son denigrantes, aún existen roles tradicionales donde la mujer se ocupa de las tareas de la casa, fregar, cocinar, limpiar, lavar, cuidar hijos, además de trabajar en la calle, mientras el hombre descansa y resuelve (Entre comillas) otros “problemas”.
Son frecuentes las incomprensiones de los esposos, ellos pueden llegar tarde al hogar tomando bebidas alcohólicas con amigos, por citar ejemplos, sin embargo este hecho es permisible por la esposa y por lo general no pasa ningún problema, en tanto un gran porciento de féminas son discriminadas por retardarse luego de una reunión laboral o una actividad de superación.
Existen múltiples acciones que demuestran que en Cuba está arraigado rasgos del machismo, muchas desean ocupar cargos de dirección, más no se atreven a aceptarlo, y a veces somos las mismas mujeres las que le admitimos a la pareja y a los propios hijos exigencias que van en contra de la independencia y los derechos que humanamente están legislado por al Gobierno.
Y cuando se habla del tema de la infidelidad al sexo masculino le suma y al femenino le resta realizar este acto incorrecto para ambos, y si a esto le agregamos que a los niños le preguntan ¿Cuántas Novias tienes? Y a las niñas se le dice, abre los ojos y cierra las piernas, entonces podemos asegurar que es la sociedad la que crea y sigue trasmitiendo de generación a generación una educación sexista equivocada.
Luchemos contra estos rezagos del pasado, no permitamos que un porciento de los hombres nos traten como si fuéramos objetos decorativos y en algunos casos como si no fuéramos seres racionales, la Revolución Cubana, le ha dado a la mujer el lugar que ella merece.
Reconozcamos que la violencia intrafamiliar existe en muchos hogares al igual que el machismo, eliminemos este flagelo.
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