TOMAS METROLOGO AVILEÑO DESTACADO

La vida de Tomas Alamino Gómez, está cargada de interesantes anécdotas, es un hombre que desde muy joven se incorporó a trabajar sin descuidarse de la superación.

 

Por eso luego de cerca de TREINTA años de vida laboral está a la vanguardia en el  grupo de técnicos de Metrologìa de la provincia Ciego de Ávila.

 

Pude robarle parte de su historia, pues se caracteriza por su lacónico verbo, al preguntarle  sobre la cualidad que más admira de los seres humanos,  sin vacilar me dijo: la estabilidad.

 

Y luego añadió: Por eso estuve TRECE años de instrumentista en el Central del municipio avileño de Venezuela y llevo ese mismo tiempo  viajando desde mi terruño hasta  la capital provincial donde radica  el Laboratorio de Metrología.  

 

A pesar de que Tomás peina canas no llega  a los 50 años de edad, lo vemos enérgico  en el volante del microbús que conduce, para ejecutar la faena de verificar la magnitud de masas de  los instrumentos de medición en varios sectores económicos y sociales.

 

Su riqueza mayor es su hija Lisett fruto del amor con Iraida su siempre novia, con quien celebró las bodas de plata, y al decir de ese hombre enamorado, vive al lado de la mujer que  soñó, compañera siempre dispuesta a seguirlo en sus preferencias.

 

Al  avileño Tomas Alamino Gómez, de serio carácter, que prefiere el color azul, la modestia y la verdad,  regalo la crónica que termina  con el sello que merece: elogio la forma persistente de su actuar,  y la disposición de no escatimar horarios por el progreso de la ciencia de las mediciones.